Williamsburg es un ejemplo destacado de revitalización urbana y gentrificación. Su desarrollo inicio en el siglo XIX, como un centro industrial en el que se encontraban astilleros, fábricas de azúcar, cervecerías y entre otras industrias; por lo que fue un punto de atracción para muchos inmigrantes europeos en búsqueda de trabajo. Las viviendas eran modestas, y el paisaje urbano estaba marcado por edificios industriales y almacenes.
A mediados del siglo XX, la declinación de las industrias genero una una notable disminución en su población. Lamentablemente en este este periodo, se incremento la criminalidad y el deterioro urbano.
Hacia las últimas décadas del mismo siglo e inicios del siglo XXl, el barrio comenzó a atraer a artistas, músicos y jóvenes profesionales debido sus economicos alquileres y su proximidad a Manhattan.
Con el tiempo, las antiguas fábricas se convirtieron en lofts y estudios de arte, y los espacios vacíos dieron lugar a galerías, bares y restaurantes. Esto trajo consigo tanto beneficios como desventajas, como el aumento de los alquileres y el costo de vida, desplazando humildes residentes.
La Comunidad Judía Ortodoxa en Williamsburg
Visitar Williamsburg es como abrir una ventana a otra época en medio de una ciudad que no para. Este rincón de Nueva York, ubicado en Brooklyn, es conocido por su diversidad cultural, su ambiente artístico y, especialmente, por ser el hogar de una de las comunidades judías ortodoxas más grandes fuera de Israel. Pasear por sus calles te da una sensación muy diferente a la que se vive en Manhattan, y por eso muchos lo consideran uno de los puntos más curiosos del tour contrastes de Nueva York.
Williamsburg, un barrio con estilo propio
Caminar por Williamsburg es encontrarse con hombres vestidos con sombreros negros, largos abrigos oscuros y tirabuzones a los lados del rostro. Las mujeres suelen vestir de forma muy recatada, con faldas largas, blusas de manga larga y, en muchos casos, pelucas o pañuelos cubriendo el cabello. Esta comunidad, mayormente jasídica, mantiene un estilo de vida muy conservador, guiado por las reglas de su religión.
A primera vista, puede parecer un lugar completamente cerrado al visitante, pero no es así. Si bien es cierto que no se trata de una zona turística como lo es Times Square, Williamsburg tiene un ritmo propio, más tranquilo, casi como un pequeño mundo dentro de otro. Y eso es justamente lo que lo hace tan interesante dentro del tour contrastes de Nueva York.
Aprendiendo de historia en el barrio Judío de Nueva York
Algunas calles parecen salidas de un libro de historia: letreros en yidis, tiendas de ropa tradicional, panaderías kosher con recetas que se han pasado de generación en generación. En ciertos horarios, sobre todo al salir de las sinagogas o de las escuelas religiosas, verás a familias enteras caminando juntas, siempre con un aire de respeto y solemnidad.
Uno de los momentos más especiales es visitar este barrio un viernes por la tarde, cuando la comunidad se prepara para el Shabat. Las tiendas cierran temprano, las familias regresan a casa, y se respira una especie de calma muy particular. Es como si todo se detuviera por un instante. Es importante ir con respeto y sin interrumpir sus costumbres, pero es, sin duda, una forma única de entender cómo se vive la fe de manera cotidiana.
Williamsburg, un barrio lleno de Contrastes
Pero Williamsburg también tiene otra cara. A pocas cuadras del núcleo más religioso, el ambiente cambia completamente. Aparecen los cafés con mesas al aire libre, las tiendas de ropa de diseñadores independientes, los murales pintados con grafiti y las galerías de arte.
Y aunque parezcan mundos que no se tocan, conviven todos los días. Esa dualidad es una de las razones por las que el barrio judío en Nueva York es un punto importante en muchos tours guiados. En especial, en el tour contrastes de Nueva York, que justamente busca mostrar los diferentes rostros de la ciudad: del lujo de Manhattan al Bronx más auténtico, de la multiculturalidad de Queens a los silencios de Williamsburg.
Williamsburg es un imán para los creativos. La presencia de numerosos estudios de arte, galerías y espacios de exhibición refleja una comunidad vibrante de artistas visuales, músicos y diseñadores. La Brooklyn Art Library, por ejemplo, alberga el Sketchbook Project, una colección colaborativa de cuadernos de bocetos que artistas de todo el mundo contribuyen. Además, festivales como Northside Festival celebran la música y el arte local, atrayendo a una audiencia diversa y apasionada.
Gastronomía y Entretenimiento
El panorama gastronómico de Williamsburg es tan diverso como su población. Desde restaurantes de alta cocina hasta camiones de comida callejera, el barrio ofrece una gama impresionante de opciones culinarias.
Restaurantes como Lilia, que ofrece una interpretación moderna de la cocina italiana, y Peter Luger Steak House, un establecimiento histórico conocido por sus bistecs, destacan la variedad y la calidad disponibles.
Los bares y cafeterías también son puntos clave de encuentro social. Radegast Hall & Biergarten, un bar al estilo alemán, y Devoción, una cafetería que se enorgullece de servir café de origen único, son ejemplos de los muchos lugares donde los residentes y visitantes pueden disfrutar de una bebida y buena compañía.
Compras y Moda
Las boutiques y tiendas independientes de Williamsburg reflejan su espíritu ecléctico y vanguardista. Tiendas como Bird, que ofrece una cuidada selección de moda contemporánea, y Artists & Fleas, un mercado de pulgas que alberga a vendedores de ropa vintage, arte y joyería, son destinos populares para los amantes de la moda y los objetos únicos.
Espacios Públicos y Recreación
Este barrio cuenta con varios espacios verdes que ofrecen a los residentes y visitantes un respiro del ajetreo de la ciudad. McCarren Park, uno de los parques más grandes de la zona, ofrece instalaciones deportivas, una piscina pública y áreas para pícnic.
East River State Park, con sus vistas impresionantes del horizonte de Manhattan, es un lugar popular para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Otra alternativa es el paseo a lo largo del East River Waterfront, una de las actividades favoritas de los residentes de Williamsburg.
Eventos y Vida Nocturna
Williamsburg es el hogar de numerosos eventos culturales y festividades que reflejan su diversidad y creatividad. El Williamsburg Walks, un evento anual donde las calles se cierran al tráfico y se llenan de actividades y actuaciones, es un ejemplo de cómo el barrio celebra su comunidad.
Los mercados callejeros, que se celebran regularmente, también son una parte vital de la vida en Williamsburg, ofreciendo desde comida y artesanías hasta música en vivo.
La vida nocturna en Williamsburg es legendaria. Con una gran cantidad de bares, clubes y salas de conciertos, el barrio es un destino popular para aquellos que buscan entretenimiento nocturno.
Williamsburg en el Tour Contrastes de Nueva York
Esa dualidad es una de las razones por las que el barrio judío en Nueva York es un punto importante en muchos tours guiados. En especial, en el tour contrastes de Nueva York, que justamente busca mostrar los diferentes rostros de la ciudad: del lujo de Manhattan al Bronx más auténtico, de la multiculturalidad de Queens a los silencios de Williamsburg.
Muchos visitantes terminan el recorrido sorprendidos. Algunos confiesan que no esperaban encontrarse con un estilo de vida tan distinto en pleno Nueva York. Otros se quedan con la imagen de los niños jugando en la acera, las sinagogas modestas, y ese aire de comunidad que tan poco se ve hoy en día.
Visita este barrio con nosotros, en nuestra Excursión Contrastes de Nueva York, conoce 4 de los 5 distritos de Nueva York y sus lugares más pintorescos de la ciudad.
